Reseña: Braulio Lam - Kinetic (Remixes)


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Braulio Lam (Varios Artistas)
Kinetic (Remixes)
SCORE: 7 Warps de 10 

Diferentes generaciones de la escena electrónica local se unen para remezclar el incorpóreo Kinetic (2018) tratando de inmiscuirse entre los densos estratos y loops para proveerlos de una columna dorsal que los sostenga.  

En la obra original, Braulio Lam canalizó toda su atención al manejo de vaporosas texturas las cuales iban tomando forma lentamente al irse añadiendo más y más elementos a la fórmula. La mayoría de los temas carecían de un beat discernible que te anclara a la realidad, por lo que era muy fácil perderse en el éter que estos generaban; los que sí contaban con un ritmo más o menos tangible, lo mantenían a distancia, sonando más como leves latidos cardiacos escuchados a través de un estetoscopio apenas funcional, que a ritmos programados. 
Los diferentes estilos que componían Kinetic se acoplaban de manera coherente; los pasajes ambientales, sampleos procesados y hasta un break beat que se materializa aparentemente de la nada después de un breve silencio, cabalmente construían una obra que claramente no se puede catalogar como "ambient" promedio, sin embargo, aún guarda bastantes similitudes con trabajos de artistas como Balam Acab, Gas, Andy Stott, entre otros. 

Kinetic (Remixes) ve a figuras del medio electrónico, como los ya veteranos e influyentes Pepe Mogt y Ramón Amezcua, interviniendo los escurridizos temas de Lam dotándolos de ritmos más claros y en algunos casos, haciendo a un lado las complejas texturas para enfocarse en un aspecto en específico y de ahí partir. 
El aporte de Mogt a este compilado es el más reservado de todos y es uno de los pocos que podrían acoplarse sin problemas a Kinetic. La alteración consta primordialmente en desenterrar el beat, desempolvarlo, darle brillo y ponerlo al frente de la mezcla. El ritmo ahora es más claro, sin tornarse en el centro de atención de la pieza permitiendo que lo que queda al fondo se pueda seguir apreciando. 
En manos de Fax, "Kinetic 5" se ve acompañado de un punzante bajo sintético y otros detalles sonoros, como una acentuada cadencia y texturas adicionales, que complementan el nebuloso efecto del tema original. La magia de este remix radica en haberle encontrado el pulso a un espectro, pues se trata de uno de los tracks más abstractos del álbum primigenio. Igual sucede en "Kinetic 2" por la dupla Amezcua (Ramón y Eduardo). El dúo exagera elementos y deshace otros (como ese sonido burbujeante al que se le baja la velocidad), dándole un nuevo semblante. 
Es a partir de aquí donde las renovaciones son más invasivas; donde la metamorfosis parece haber sido un proceso lacerante para cada canción. 
Uno de los temas que más sufren es "Kinetic 7". El resultado final no es malo, sin embargo, toda la sustancia de la canción fue hecha a un lado para presentar un tema que mantiene las cosas bastante safe con un ritmo repetitivo, mientras que las texturas originales quedan al fondo. 
Machino presenta uno de los mejores tracks; bastante alejado de su materia prima, pero el ritmo estridente es bastante efectivo, así como la estática que lo rodea, muy al estilo de JT Whitfield. Lo que lo hace funcionar, es el que hecho de que se supo seleccionar el tema a modificar. No es que "Kinetic 3" no funcione, pero su remezcla presenta algo que se escondía en el fondo; no es precisamente una mutación, es más como una autopsia. 

Kinetic en su estado puro es una propuesta más interesante por el simple hecho de que le pide más al escucha. No se trata precisamente de una de las experiencias emocionales más intensas, sino de una oda al lado técnico del género, un paraíso auditivo para los gear-heads y tech-heads. 
Algunas de las modificaciones realmente se valieron de lo que les dictara el tema para dejarse llevar, trabajando en conjunto con lo que el autor original quiso lograr al momento de componer los tracks. En otros casos, pareciera que el punto de referencia fue mínimo, despojando a los temas intervenidos de su escencia y afectando de manera negativa el nivel de inmersión que poseían; sin embargo, incluso esas mezclas funcionan muy bien como piezas independientes, que podrían estar en el catálogo de cada uno de los artistas sin que la necesidad de ligarlos a las obras originales sea imperativa.

g.n.h

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